En la vida, normalmente trasladamos en nuestro quehacer diario lo que anteriormente hemos hecho en situaciones anteriores.

Cuando las aplicaciones informáticas se iniciaron, los usuarios obtenían los datos de las mismas en informes impresos (en papel) y de ahí, estudiaban y explotaban los mismos.

Hace ya muchos años (al menos desde 1995) que los usuarios disponen de hojas de cálculo que les permiten hacer estudios de sus datos y presentar los mismos a su equipo o a sus responsables. Al principio copiaban los datos de los informes (papel) y más adelante, los informáticos éramos capaces de generales ficheros csv, dbf, etc. que les permitían explotar más rápido los datos.

Hemos evolucionado mucho, pero todavía nos queda bastante. Creo que seguimos (casi todos) con la idea de que los sistemas deben producir los informes en PDF (que por similitud a los informes en papel nos parece más adecuado).

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